Por: Ursula Muñoz S.
Hacer películas de género no es nada fácil en esta era de superproducciones hollywoodenses, cuyos altos presupuestos y grandiosos efectos especiales han establecido estándares elevados para la acción, la fantasía y la ciencia ficción. Entre los grandes conglomerados que respaldan las franquicias más populares, la saturación del mercado con propiedad intelectual ha dejado poco espacio para la competencia y ha generado un sesgo cultural que favorece lo familiar y desincentiva la originalidad. En este contexto, crear historias originales que den lugar a voces normalmente excluidas de los medios populares representa, en sí mismo, un logro significativo.
Entra en escena Vico Ortiz, actore, activista y artista drag boricua, quien durante los últimos años ha roto esquemas en los géneros de acción, horror, fantasía y ciencia ficción. Mejor conocide por su interpretación del pirata Jim Jiménez en la serie Our Flag Means Death de HBO, Ortiz cuenta con un amplio portafolio que incluye títulos como S.O.Z. Soldados o Zombis, Harley Quinn y Adventure Time: Fionna and Cake, entre otras. Su proyecto más reciente, la película Spark, es una aventura de viajes en el tiempo escrita y dirigida por el joven cineasta Nicholas Giuricich, y actualmente está disponible en VOD.
Un tercio comedia romántica, un tercio drama LGBTQ+ y un tercio thriller de ciencia ficción, Spark cuenta la historia de Aaron (Theo Germaine), un joven trans que vive en Los Ángeles y que, tras conocer al misterioso galán Trevor (Danell Leyva), queda atrapado en un ciclo temporal que lo condena a repetir el mismo día una y otra vez. Como astuta parábola sobre las frustraciones que surgen en la escena romántica de Los Ángeles, Spark es abiertamente queer pero identificable para todos. Hablando con Sabor Coco, Giuricich dijo que busca “mostrar, entre muchas otras cosas, que hay más similitudes en nuestras experiencias vividas, en lo que deseamos y en lo que buscamos, que diferencias”. Como Danny, el chistoso pero cariñoso roommate de Aaron, Ortiz aporta un toque humorístico a la película, a la vez que contribuye a su núcleo emocional.
“Lo único que lamento es no haber podido pasar más tiempo con Vico, simplemente porque no compartimos muchas escenas”, dice Danell Leyva, quien interpreta a Trevor, el rival romántico de Danny. “Nos llevamos súper bien desde el principio; éramos casi como primos”.
Su buena relación refleja una de las grandes fortalezas de la película: su reparto diverso que, al representar fielmente a la vibrante escena queer de Los Ángeles y su considerable población latina, le otorga una autenticidad que suele faltar a muchas producciones hollywoodenses que caen en el tokenismo. Mientras tomaba un descanso de sus aventuras por el Atlántico y sus viajes a través del tiempo, Ortiz tuvo la amabilidad de reunirse con Sabor Coco para hablar sobre la ciencia ficción, su identidad queer y los obstáculos de ser latine y no binarie en Hollywood.
Esta entrevista ha sido traducida del inglés y editada para mayor brevedad y claridad. Incluye pequeños spoilers sobre la película Spark.
¡Felicidades por lanzar Spark al mundo! Debo decir que es refrescante ver una película estadounidense con tanto talento latino y LGBTQ+ en pantalla. Muchas veces se nos limita a un solo personaje secundario, si es que formamos parte del reparto. ¿Cómo fue trabajar en un set tan diverso, junto a actores como Theo Germaine y Danell Leyva?
¡Fue increíble! Y si no me equivoco, la directora de casting también es de ascendencia latina, y ella es increíble. Yo audicioné para esto, así que no sabía en qué dirección lo iban a tomar, porque originalmente estaba escrito —si no me equivoco— para ser sobre un grupo de hombres cis/gay en West Hollywood, y yo estoy acostumbrade a ser un poco impredecible en las audiciones. Pero me identificaba con el personaje, porque claro que me he enamorado profundamente de mi mejor amigo, así que di mi versión de eso.
Luego me eligieron y me dijeron que Theo Germaine estaba involucrade. Me encanta Theo. Nunca había trabajado con elle hasta ese momento pero coincidíamos en los mismos círculos, así que cuando me enteré de que le habían ofrecido el papel principal, pensé: "¡Esto va a ser brutal!". Luego conocí a Leyva en el set y empezamos a hablar, a reírnos de nuestras similitudes y a hacer chistes de que el personaje de Theo tiene sus preferencias.
Nos divertimos muchísimo; la directora de casting hizo una magia preciosa, y Nick, siendo un guionista y director maravilloso, un aliado increíble y alguien que desafía las normas, dijo: "Acho, ¡claro que sí!". Al final del día, cualquiera puede identificarse con la historia. Todos nos hemos encontrado en un patrón de enamorarnos de las mismas personas una y otra vez, sin importar en qué punto del espectro te encuentres.
Me interesan mucho las películas que usan el género como vehículo para explorar temas más amplios, ya sea la política y los problemas sociales o, en este caso, la escena romántica queer en Los Ángeles. ¿Dirías que los elementos fantásticos de Spark ayudan a que sus temas sean más accesibles para el público general?
El género es una forma increíble de profundizar temas específicos. A mí, personalmente, me encanta el realismo mágico. Creo que es una forma estupenda de, a través de elementos fantásticos y míticos, explorar el trauma, explorar la sanación y explorar patrones, sean cuales sean. Claro, esto se trata de solo dos personajes que caen en el mismo día una y otra vez, pero eso pasa, ¿no? Sales con alguien durante tres o cuatro meses, y luego terminas esa relación y empiezas otra, y es el mismo tipo de relación de nuevo.
Entre títulos como The Sex Lives of College Girls, Our Flag Means Death y, ahora, la película Spark, has participado en muchas películas y series de televisión con grandes elencos que incluyen mucho talento LGBTQ+. ¿Es esto una decisión consciente que tomas al elegir tus proyectos?
Casi siempre, los proyectos me eligen a mí. [ríe] Me alegra cuando se alinean con mis valores como cuentista. Quiero contar historias que reflejen mi mundo, y mi mundo es muy diverso, muy queer y muy expansivo. No soy la típica persona trans, no binarie, latine y poliamorosa. Soy una entre muchas, ¿verdad? Tengo muchos amigos trans y no binarios, y todos nos expresamos de forma diferente. Ya sean cis o trans, las personas de mi entorno buscan expresarse y recuperar partes de sí mismas fuera de las espectativas tradicionales.
Me aburro mucho cuando veo películas o series hechas como del mismo molde, o de la misma manera. La vida no es así. Quiero ver historias tan humanas que cualquiera pueda aportar los detalles de su propia experiencia a un papel, para que sigamos viendo, como público, cosas que abren nuestras perspectivas y para que estemos en constante reflexión mutua, aprendiendo y creciendo, expandiendo y sanando.
Como alguien que ha participado en producciones pequeñas e independientes y también de gran escala de Hollywood, ¿has lidiado con la tokenización en el pasado?
Me han tokenizado de muchas maneras. Una vez que me declaré trans y no binarie, me tokenizaban como eso, y también me tokenizaban antes, como alguien latine. La latinidad no es un monolito, ¿sabes? Hay varias maneras de ser latine, y ser latinoamericano no significa saber hablar español. Hay gente que habla portugués, francés, inglés y muchos otros idiomas, sin mencionar las lenguas nativas antes de la llegada de los colonos españoles.
En los proyectos independientes es donde menos me han tokenizado. Es en redes más grandes donde suele caer eso. En algunos proyectos, veo que soy la única persona queer y trans de color, y digo: "pues bien. Anotado". Pero también he visto cómo eso ha cambiado. Es muy refrescante llegar [a un set], mirar alrededor y decir: "¡Guau, no soy la única persona [así]". Y no solo en el cast, sino también en la sala de guionistas o en los servidores de visualización: muchas personas con diversas experiencias.
Me gusta que hayas mencionado a las personas no en pantalla, porque siento que no se les suele reconocer cuando hablamos de la inclusividad en los medios, pero su trabajo es igual de importante. Hay tantas series y películas estadounidenses con lo que llaman el “enfoque latino”, por ejemplo, donde los diálogos… no funcionan.
¡Como ahora mismo, con Emilia Pérez! Yo decía: "¿Esto lo tradujeron con Google?". Lo único [que me gustó] de esa película fue que nos dieran una protagonista trans lesbiana. Pero aparte de eso... ¿qué carajo? [ríe]
Eso es un buen punto: la mayoría de las personas trans que conozco en la vida real están en el espectro queer, pero eso tampoco lo vemos reflejado mucho en los medios. Dicho esto, ¿cómo fue interpretar a una pareja de T4T en Spark?
¡Increíble, porque eso es mi día a día! Obviamente, me he enamorado de personas cis y no todes con quien he estado han sido trans, pero muchas de las personas con las que tengo relaciones lo son, así que es nítido ver una dinámica T4T. Siento que la mayoría de la gente asumiría que si Aaron está con un hombre cis, es pasivo; pero si está con una persona trans que no usa testosterona y no se ha operado, entonces Aaron sería el que toma el rol activo. Pero la expresión [de género] no es lo mismo que la intimidad y es nítido ver las distintas formas en que las personas se relacionan entre sí e interesarse en cómo los cuerpos se encuentran con cuidado, amor y entrega. ¡Danny es una frutita, pero puede ser active también!
Antes de irnos, tengo una última pregunta sobre el elemento de ciencia ficción en Spark. Los ciclos temporales están de moda ahora mismo: Palm Springs, Russian Doll y Happy Death Day me vienen a la mente como ejemplos recientes de películas y series de TV que abordan el tema. Para quienes no han visto Spark, ¿cómo dirías que se diferencia esta peli de otras que usan los ciclos temporales como herramienta narrativa?
Mmm. Creo que, en cierto modo, es su propio universo. Muchas veces, los ciclos temporales y las películas de viajes en el tiempo tratan sobre salvar a alguien, salvar a un planeta o salvar alguna línea temporal. [Spark] nos hace la pregunta: ¿tienes lo necesario para salvarte a ti mismo? Porque en verdad, solo Aaron permanece en su propio ciclo temporal una y otra vez. Así que no se trata de salvar el mundo, ni de que Danny salve a Aaron (aunque lo intenten). Es algo más personal. El único que te puede salvar, eres tú.